El uso incontrolado de las tecnologías es perjudicial a todas las edades, pero tiene un impacto mayor en los más jóvenes. Además de afectar su aprendizaje y concentración, provoca también alteraciones del sueño. La luz azul de las pantallas tiene un efecto nocivo sobre la melatonina y esta, sin duda, afecta al sueño de los que más lo necesitan para su desarrollo.
Desde el Equipo Clínico queremos haceros llegar algunas de las recomendaciones y buenas prácticas importantes a llevar a cabo para proteger la salud física e intelectual de niños y jóvenes.
Crear zonas y horas libres de la influencia de las pantallas, promover un uso responsable de las tecnologías, fomentar la lejanía a las mismas en los momentos de trabajo y buscar otro tipo de actividades estimulantes de realización colectiva, son sólo algunas de ellas.
Si necesitas más información, contacta con nosotros en el 91 709 80 91 o escríbenos a equipoclinico@atam.es
Sobre el autor
María Laorden
Neuropsicóloga del Equipo Clínico de ATAM