El tratamiento de la escoliosis depende de la gravedad de la curvatura. Los niños que presentan curvaturas leves generalmente no necesitan ningún tratamiento, aunque se suelen realizar controles periódicos para determinar si la curvatura empeora a medida que crecen, y se mantienen estas revisiones hasta que se detiene el crecimiento.
Como tratamiento complementario, es fundamental realizar una educación en corrección postural mediante escuela de espalda. Esta labor se realiza por parte de profesionales de la fisioterapia y rehabilitación.
Cuando la curva es moderada o grave, es posible que se requiera el uso de ortesis (corsé) o incluso cirugía. Entre los factores para tener en cuenta, se incluyen los siguientes:
- Madurez ósea: Si los huesos de un niño han detenido su crecimiento, el riesgo de que progrese la curva es bajo. Las ortesis (corsés) tienen efecto en los niños cuyos huesos aún están en crecimiento. La maduración de los huesos se puede comprobar con radiografías de la mano o de la pelvis.
- Grado de la curva: Es más probable que las curvaturas más pronunciadas empeoren con el tiempo.
- Localización de la curva: Dorsal, lumbar, dorsolumbar o cervicodorsal.
- Causa: Idiopática, congénita, neuromuscular.
- Sexo: Las niñas tienen un mayor riesgo de que progrese la enfermedad que los niños.
Corsés
En casos de escoliosis moderada y cuando el niño aún está en periodo de crecimiento, el médico puede recomendar el uso de un dispositivo de inmovilización (corsé). Cuando colocamos un corsé hay que tener claro que no cura la escoliosis ni corrige la curvatura, sino que el objetivo será evitar que la curvatura empeore. No suele ser útil en casos de escoliosis congénita o neuromuscular.
Los corsés habitualmente están hechos en termoplástico a medida y tienen un contorno que se adapta al cuerpo. Casi no se ve bajo la ropa, ya que se ajusta debajo de los brazos y alrededor de la caja torácica, la región lumbar y las caderas. La mayoría de los corsés se usan entre 13 y 16 horas al día. La efectividad de un dispositivo de inmovilización aumenta con la cantidad de horas al día que se usa.
Los niños que usan dispositivos de inmovilización, a menudo, pueden practicar la mayoría de las actividades y tienen pocas restricciones. Si es necesario, los niños pueden quitarse el dispositivo de inmovilización para practicar deportes u otras actividades físicas. En algunos casos, se puede indicar un corsé de uso exclusivamente nocturno, como por ejemplo el Providence.
El corsé se puede retirar definitivamente cuando deja de haber cambios de estatura. De media, las niñas completan su crecimiento a los 14 años y los niños a los 16 años, pero esto varía según los casos.
Cirugía
La escoliosis grave suele aumentar con el tiempo, por lo que podría ser necesaria una cirugía para ayudar a enderezar la curvatura de la columna vertebral y evitar que siga empeorando.
Existen varios tipos de cirugía para la escoliosis, si bien la más frecuente es la fijación o fusión de la columna vertebral. Consiste en la unión de dos o más vértebras de manera que no puedan moverse de forma independiente. Para ello se colocan injertos óseos entre las vértebras, así ganchos, tornillos o cables de metal que se unen mediante una o dos varillas metálicas que mantienen en posición ese segmento de la columna.
Después de la cirugía, es posible que también necesite usar un corsé durante un tiempo.
Estilo de vida y remedios caseros
No hay actividades específicas que causen o corrijan la escoliosis. En general, las personas con escoliosis no tienen limitaciones para levantar objetos o realizar actividades.
Se recomienda realizar ejercicio saludable o practicar deportes, especialmente aquellos que fomenten más la flexibilidad de la columna y se ejecuten de forma simétrica, es decir ejercitando ambos lados del cuerpo por igual.
Medicina alternativa
Los estudios indican que los siguientes tratamientos para la escoliosis no ayudan a corregir la curvatura:
- Manipulación quiropráctica
- Ortesis blandas
- Estimulación eléctrica de los músculos
- Suplementos alimenticios
¿Cómo saber si debo consultar al médico?
Debes consultar al médico si observas signos de escoliosis. Las curvaturas leves pueden formarse sin que se noten, dado que se manifiestan progresivamente y, por lo general, no producen dolor.
En ocasiones, los profesores, amigos o compañeros de deporte de los propios niños son los primeros en detectar este tipo de problema.
Sobre el autor
Dr. César Hernández de la Peña
Médico rehabilitador del Equipo Clínico de ATAM